El día de la Santísima Trinidad, el padre Raúl Carrillo será ordenado episcopalmente por el Cardenal Filoni
Fotografía Diócesis de Zipaquirá
ZIPAQUIRÁ.
El próximo domingo 22 de mayo, día de la Solemnidad de la Santísima Trinidad, el padre Raúl Alfonso Carrillo recibirá la ordenación Episcopal en la Catedral Primada de Bogotá, de manos del Cardenal Fernando Filoni, Prefecto para la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, quien viene desde Roma a presidir esta Consagración Episcopal.
En esta ceremonia estará también el obispo de Zipaquirá, Monseñor Héctor Cubillos Peña; el Arzobispo de Villavicencio, Monseñor Óscar Urbina Ortega; varios obispos de Colombia; el presbiterio Diocesano, sacerdotes de Puerto Gaitán y de otros municipios del Meta, feligreses de las comunidades de la Diócesis de Zipaquirá y otros invitados.
“Recibirá la ordenación Episcopal en la Catedral Primada de Bogotá, de manos del Cardenal Fernando Filoni, Prefecto para la Congregación para la Evangelización de los Pueblos”.
Posteriormente, en una fecha cercana, pero que aún no se ha revelado, tomará posesión de la Vicaría Episcopal de Puerto Gaitán.
Han sido innumerables las expresiones de agradecimiento, alegría y júbilo, que al mismo tiempo contrastan con la tristeza de ver partir a uno de los pastores más queridos que ha tenido la Diócesis de Zipaquirá en las diferentes parroquias y lugares donde ha realizado su trabajo religioso; sin embargo le han manifestado complacencia y le han pedido a Dios que le envíe el Espíritu de Sabiduría y que le acompañe siempre en esta nueva misión que ahora asume con toda humildad y con el anhelo infinito de continuar la obra que Dios le ha encomendado, ahora en esta comunidad que se ha caracterizado por ser una zona ganadera y petrolera.
“He recibido con mucha alegría este nombramiento y lo asumo como un gran reto pastoral y así poder trabajar con la comunidad, donde mi primera tarea es inculturizarme sobre esta región del país, conocer estas comunidades, el clero y las etnias indígenas que hay allí, a las cuales también atenderé de corazón; evangelizar es mi tarea y llevar a la alegría el Evangelio como el Santo Padre nos ha impulsado en estos tiempos de renovación a la iglesia, y hacer que todas las personas sigan conociendo a Jesucristo, tomándolo y llevándolo en su corazón”, manifestó el nuevo Obispo.
“Han sido innumerables las expresiones de agradecimiento, alegría y júbilo, que al mismo tiempo contrastan con la tristeza de ver partir a uno de los pastores más queridos que ha tenido la Diócesis de Zipaquirá en las diferentes parroquias y lugares donde ha realizado su trabajo religioso”
